Tres mil víctimas dejan las inundaciones en La Mojana
En la región del río Cauca, una situación alarmante ha tomado fuerza debido a un sobrecargador que ha llevado

En la región del río Cauca, una situación alarmante ha tomado fuerza debido a un sobrecargador que ha llevado a que las aguas superen el nivel de Rabón Caño, en las zonas rurales de Guaranda (Sucre). Este fenómeno ha resultado en severas inundaciones que han afectado considerablemente a los corregimientos localizados en esta jurisdicción, generando un estado de emergencia en la comunidad.
En el día de hoy, las localidades más perjudicadas por esta crisis incluyen a El Jardín y la Nueva Esperanza. Ante la gravedad del asunto, el alcalde ha declarado alerta roja, instando a los habitantes a estar preparados para una posible evacuación. Esta medida busca proteger a la población ante una situación que podría empeorar en las próximas horas.
La comuna de Guaranda ha visto cómo alrededor de 35,000 hectáreas cultivadas con arroz han quedado anegadas, afectando profundamente la productividad agrícola de la zona. Durante los últimos cuatro años, esta región ha enfrentado accidentes repentinos relacionados con inundaciones, lo que ha generado un ciclo de inestabilidad y desesperanza entre los cultivadores.
El alcalde de Guaranda, Nolberto Belttrán Blanco, declaró que el alcance de las aguas ha invadido todas las áreas cultivables, aumentando el riesgo de un fracaso agrícola inminente que ya amenaza la economía local. “Es una tragedia que se repite, y necesitamos atención inmediata”, afirmó, subrayando que el municipio también ha alcanzado su límite en términos de recursos para responder a la emergencia.
Desperdiciado en la mojana Foto:Archivo privado
En medio de este contexto dantesco, la administración local, en colaboración con el Ministerio de Educación, ha decidido suspender las clases en todas las zonas rurales afectadas, lo que afecta a miles de estudiantes. Este es un paso necesario para garantizar la seguridad de los niños en un momento en que el agua sigue subiendo.
“Es mejor interrumpir las clases temporalmente para proteger a nuestros hijos, dado que las condiciones climáticas siguen siendo adversas con lluvias persistentes desde Antioquia, lo que permite que las inundaciones continúen avanzando,” expresaron algunos padres de familia preocupados por la situación.
Inicialmente, la suspensión de clases estaría vigente hasta el próximo viernes 16 de mayo, aunque la prolongación de este periodo es probable, considerando lo complicado que será resolver esta crisis de forma rápida.
Las escuelas más afectadas se encuentran en varios corregimientos y caminos de la región de Rabón, que incluyen los municipios de Guaranda, Majagual y Sucre. Asimismo, la crisis ha tenido efectos en las jurisdicciones de Villa de San Benito Abad y Corregimientos cercanos, que también han empezado a ver el impacto de las aguas del río Cauca y del río San Jorge.
Las instituciones educativas que han sufrido daños se han identificado en varias localidades, incluyendo San Matías, El Garden, Sincelejito, Boca de las Mujeres, Nueva Esperanza, Gavaldá y los Drags. La situación es crítica y requiere atención urgente de las autoridades competentes.
Inundaciones en La Mojana Foto:Archivo privado
Francisco Gómez Osorio, ex alcalde de Majagua y quien ha enfrentado situaciones similares en el pasado, comentó que es indispensable establecer un sistema de control efectivo que impida que el agua inunde estas regiones. “Es fundamental que las autoridades analicen lo que está ocurriendo, ya que no hay una razón física o natural que justifique que áreas como San Marcos estén secas mientras otras se inundan”, agregó.
Muchas teorías se han propuesto en cuanto al fenómeno, entre ellas la acumulación de sedimentos que podrían estar agravando la situación. Algunas voces incluso sugieren que, al igual que en la historia de Moisés y el Mar Rojo, la creación de barreras adecuadas podría ser una solución. “Lo que necesitamos es una estructura sólida y compacta que contenga el volumen de agua y evite que cause más desastres,” manifestó Gómez Osorio.
Sin embargo, también hay quienes creen que hay intereses ocultos que impiden una solución. “La verdad es que hay quienes se benefician del silencio de la comunidad. No veo que el milagro ocurra aquí sin intervenciones que velen por el bienestar colectivo,” dijo, denunciando posibles encubrimientos.
En resumen, la situación en la región durante el mes de agosto se presenta desoladora, con el agua y la infraestructura afectadas en caminos clave entre Majagual y San Marcos. Por el momento, la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo e Inspecciones está trabajando en la expansión del Canal de la Esperanza, convencidos de que esta puede ser parte de la solución para mejorar la precaria situación en la que se encuentran las comunidades.
Francisco Javier Barrios
Especial a tiempo