Secretos para el éxito en la exportación textil Lafayette
Con más de ocho décadas de historia, la compañía textil colombiana Lafayette continúa tejiendo su legado, expandiendo su influencia

Con más de ocho décadas de historia, la compañía textil colombiana Lafayette continúa tejiendo su legado, expandiendo su influencia a nivel global sin señales de detenerse. Actualmente, el 40% de su producción supera las fronteras nacionales, una significativa consolidación de su presencia en 24 países, lo que refuerza su posición como una de las compañías textiles más influyentes de América Latina. Este crecimiento no es casual; es el resultado de una estrategia bien fundamentada y una visión clara de futuro.
La clave de esta notable expansión radica en la combinación de innovación tecnológica, capacidad logística y proximidad con el cliente. Cada año, Lafayette exporta alrededor de 2.400 toneladas de telas, principalmente fabricadas con poliéster funcional, orientadas a sectores estratégicos esenciales como salud, industria, deportes y sector público. Esta dedicación a la calidad y la funcionalidad ha posicionado a Lafayette como un actor primordial en diversos nichos del mercado.
Según las palabras de Hécor Pérez, gerente de negocio de Lafayette, «la exportación no se vende sola. Compartir la visión y la forma de hacer la industria empresarial con propósito es crucial». A medida que cada medida de tela que enviamos al extranjero es un producto del esfuerzo conjunto de un equipo que valora la sostenibilidad, la innovación y la calidad, se hace evidente que el éxito de Lafayette está basado en creencias compartidas y objetivos comunes.
La compañía ha construido una infraestructura comercial sólida más allá de las fronteras de Colombia. En la actualidad, cuenta con tiendas y oficinas en 15 países, lo que le permite mantener una cercanía con sus clientes y adaptar sus soluciones a las necesidades particulares de cada mercado local. Esta estrategia ha sido fundamental para fortalecer relaciones y obtener una comprensión más profunda de las demandas específicas de los consumidores en diferentes regiones del mundo.
Países como Estados Unidos, México, Chile, España, Argentina, Perú, Guatemala y Costa Rica forman parte de la extensa red internacional que Lafayette ha cultivado durante más de tres décadas. Esta presencia no se limita solamente a la venta, sino que implica una sólida conexión estratégica y duradera con empresas, instituciones y entidades públicas, lo que permite un flujo continuo de ideas y colaboraciones a largo plazo.
Un aspecto notable de su modelo operativo internacional es su enfoque logístico: sorprendentemente, el 98% de las exportaciones se realizan por aire. Esta elección poco convencional en la industria textil permite a Lafayette ofrecer un servicio de entrega personalizado, rápido y eficiente, algo crucial para clientes en sectores que no pueden permitirse retrasos en su suministro, como hospitales, compañías de seguridad y unidades militares.
En las palabras de Pérez, «nuestro compromiso no es solo con la calidad del producto, sino también con la rapidez en la respuesta. En sectores críticos, cumplir con los tiempos de entrega es vital, y nuestra capacidad para proporcionar telas de calidad en plazos ajustados es lo que nos diferencia».
Toda esta operación se basa en una planta de producción de más de 80,000 m2 ubicada en Colombia, equipada con más de 1,500 máquinas, que incluye una máquina de inspección automática única con inteligencia artificial en América Latina. Cada año, los productos de Lafayette generan aproximadamente 22,000 kilómetros de tela, lo suficiente para viajar del Polo Norte al Polo Sur, y la cantidad de hilo utilizado en su producción podría alcanzar ir y volver a la luna 58 veces. Estos impresionantes números son una clara representación del compromiso de Lafayette con la excelencia y su inquebrantable dedicación al avance tecnológico.