‘Nunca pasó por mi cabeza’
El 15 de mayo, la secretaria de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Kristi Noem, decidió abrir una investigación

El 15 de mayo, la secretaria de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Kristi Noem, decidió abrir una investigación formal en contra del Ex director del FBI James Comey debido a una reciente Publicación de Instagram que ha sido interpretada por algunos como una amenaza hacia el presidente Donald Trump.
En su cuenta de X, Noem expresó: “El ex jefe desacreditado del FBI James Comey acaba de pedir un Asesinato del presidente Trump. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Servicio Secreto están llevando a cabo una investigación sobre esta amenaza y tomarán las medidas necesarias para responder de manera adecuada”.
James Comey Foto:Recursos
La controversia surgió a raíz de una imagen que Comey había publicado en su cuenta de Instagram, donde se podía ver una serie de conchas en la playa formando la figura «8647». En la publicación, él escribió: «Curiosa formación de conchas durante mi caminata por la playa».
Sin embargo, algunos interpretaron este mensaje como un indirecta política hacia Trump, dado que el número 86, según la jerga popular, puede significar «eliminar» o «deshacerse de» alguien, como se detalla en el Diccionario Merriam-Webster. Este tipo de referencias rápidamente se convirtieron en un punto focal de análisis político.
En medio de la creciente polémica, Comey emitió una declaración en la que aclaró que nunca tuvo la intención de hacer un comentario político y que desconocía que algunos interpretaran esos números como una incitación a la violencia. “No sabía que algunas personas asocian estas cifras con violencia. Nunca se me ocurrió tal cosa, y me opongo a cualquier forma de violencia; por lo tanto, decidí eliminar la publicación”, comentó Comey.
La publicación de Comey no solo provocó respuestas de las figuras políticas cercanas a Trump, sino que también generó un fuerte debate en torno a la responsabilidad de las palabras y las acciones de los ex funcionarios. Por ejemplo, el director nacional de inteligencia, Tulsi Gabbard, llegó a afirmar que Comey debería terminar en la cárcel como consecuencia de lo que consideró un acto irresponsable.
En vista de esta señal de alarma, Comey optó por eliminar la controversia de sus redes sociales. Es importante mencionar que Comey, un republicano designado por el ex presidente Barack Obama, fue destituido de su cargo por Trump tras asumir la presidencia en 2017. Su despido fue objeto de un intenso escrutinio, particularmente porque en ese momento lideraba investigaciones sobre la supuesta intervención rusa durante las elecciones de Trump en 2016.
Las repercusiones de esta reciente controversia entre Comey y la administración Trump continúan generando debate y tensión en el panorama político estadounidense, recordando cuán delicadas son las interacciones en la esfera pública y la interpretación que se puede hacer de las mismas.
Agencia EFE