Las llaves para evitar caer en la trampa
Dramat de Blanca Inés, un residente colombiano del área de Washington, comenzó a mediados de febrero, coincidiendo con el

Dramat de Blanca Inés, un residente colombiano del área de Washington, comenzó a mediados de febrero, coincidiendo con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Este evento marcó un nuevo capítulo en la vida de Blanca, quien giraba entre la esperanza y la incertidumbre. La reactivación de la administración republicana había levantado una ola de preocupaciones entre la comunidad inmigrante, particularmente entre aquellos que enfrentaban procesos de asilo ya en marcha.
A pesar de tener un estatus legal, el proceso de asilo que había iniciado llevó más de un año sin avances significativos. Su situación se tornó aún más precaria, especialmente ante la posibilidad de que el presidente republicano pudiera cancelar cualquier proceso pendiente, ordenando revisiones exhaustivas que perjudicaban a muchos. La ansiedad que sentía por su futuro la llevó a buscar ayuda legal, como miles de migrantes en su situación.
Blanca contactó a un bufete de abogados especializado en temas migratorios. En un giro inesperado, pudo comunicarse con ellos a través de la plataforma de redes sociales TikTok. Su mensaje fue rápidamente respondido y, en poco tiempo, recibió un texto de la oficina legal para discutir su situación.
La llegada de Donald Trump ha complicado aún más la situación para los migrantes en Estados Unidos. Foto:Tiempo de archivo/ agencias
Sin embargo, lo que no esperaba es que un grupo de estafadores se había hecho pasar por abogados y, en los próximos dos meses, terminó gastando más de $5,000 en servicios de asistencia migratoria que nunca se materializaron. La historia de Blanca, que ha solicitado que se mantenga en anonimato por temor a represalias, subraya la vulnerabilidad de los migrantes en este clima hostil.
“No he tenido el valor de denunciarlos. Temo que eso me exponga a las autoridades, lo que podría llevar a mi deportación”, compartió Blanca con El Tiempo.
“Eran expertos en su fraude, muy insistentes, y supieron aprovechar nuestra desesperación y falta de información. A pesar de que hemos intentado alertar a TikTok sobre esta cuenta que nos estafó, no hemos podido hacer mucho más. Ir a las autoridades en este contexto de persecución no nos parece seguro. La confianza simplemente no está ahí”, añadió.
Su experiencia no es singular; es solo uno de los cientos de relatos que han llegado a oídos de abogados, consulados y organizaciones dedicadas a asistir a inmigrantes. Las estafas están proliferando a un ritmo alarmante, alimentándose del miedo presente en la comunidad migrante y su deseo de encontrar soluciones a situaciones desesperadas.
El miedo a ser detenido o deportado afecta incluso a aquellos que tienen un estatus migratorio legal. Foto:Getty Images/Istockphoto
De acuerdo con la Comisión Federal de Comercio (FTC), las quejas relacionadas con fraudes migratorios han aumentado, y se han más que duplicado entre 2023 y 2024.
Charlie Zanker, quien dirige Helping, una organización en Washington dedicada a asesorar a migrantes y que ha implementado el proyecto llamado final para luchar contra estos engaños, enfatiza que estos fraudes son alarmantemente sofisticados. «A menudo se hacen pasar por abogados o incluso autoridades. Si alguien se retrasa en el pago, los amenazan con deportarlo para obligarlo a pagar más. Es una situación sumamente delicada», explica.
Eran muy profesionales en su fraude, muy insistentes y explotaron nuestra desesperación y falta de información.
«Lo que estos grupos hacen es prometer resultados favorables a quienes se les consulta y, cuando alguien no paga o retrasa los pagos, lo amenazan. En el contexto actual de mayor desesperación, estos estafadores no solo se benefician de aquellos que están en situación irregular, sino también de personas que tienen estatus legal, lo que nos brinda un delicado panorama», agrega Zanker.
Modalidades de fraude hacia los migrantes
Los métodos utilizados en estas estafas son variados, pero la mayoría de ellas encuentran su impulso en las redes sociales como TikTok, Facebook y WhatsApp, donde los delincuentes han creado un entorno óptimo para engañar a migrantes desesperados.
En estas plataformas, los estafadores se presentan como abogados, configurando perfiles falsos e incluso publicando anuncios que promocionan sus supuestos servicios.
Las estafas en TikTok suelen hacerse pasar por abogados. Foto:AFP
Por ejemplo, al explorar TikTok, la gente puede encontrar un video de un abogado legítimo que ofrece un taller virtual y gratuito, el cual es aprovechado por los estafadores que también se suman. Cuando alguien tiene alguna pregunta, el estafador adopta la identidad del abogado y se comunica directamente con la persona para ofrecerle sus servicios ficticios.
Esta es la experiencia a la que se enfrenta la oficina legal de Gloria Cárdena, una abogada migrante que publica consejos legales en su cuenta de TikTok.
«Cada vez que publico un video, comienza una carrera entre mi equipo y los estafadores para llegar a los clientes primero. Hemos presentado cientos de denuncias a TikTok sobre esta actividad, pero las estafas persisten», asegura Cárdenas.
Además de escribir directamente a TikTok para revelar la cuenta pública, no hemos podido hacer más. Todos los demás pasos significan ir a las autoridades y, durante la atmósfera de persecución actual, no confiamos en ellas.
Luis Guerra, gerente de Campo de la Red Católica para la Inmigración Legal (Clínica), señala que la mayoría de estas estafas se realizan en español, lo que complica la respuesta de las plataformas que no siempre cuentan con los recursos necesarios para abordar este idioma de manera efectiva.
Esto genera un ciclo vicioso: el miedo de los inmigrantes, sumado a la urgencia de obtener soluciones, aumenta sus búsquedas en línea, lo cual alimenta los algoritmos que los dirigen a perfiles de abogados falsos. La desesperación solo se convierte en un nuevo campo de oportunidades para los estafadores.
TikTok, Facebook y WhatsApp afirman haber «eliminado» numerosas cuentas falsas. Foto:Tejer
TikTok, Facebook y WhatsApp dicen que han «eliminado» numerosas cuentas fraudulentas, pero insisten en que la supervisión en tiempo real sigue siendo un reto considerable.
Según muchos abogados en el área, las estafas cuentan con precios que oscilan entre $2,000 y $15,000, y se han reportado casos extremos de fraudes que alcanzan sumas de hasta $25,000 o más.
Luis Guerra también señala que pocos son los casos que se denuncian, dado que, en Estados Unidos, no existen leyes claras que ofrezcan respaldo a consumidores inmigrantes; además, el temor a que se registre una queja que podría llamar la atención de ICE y otras autoridades migratorias desanima a muchos.
Por su parte, Zanker advierte que, aunque resulta complicado medir el crecimiento de este fenómeno en la era Trump, «cada momento de incertidumbre relacionado con las leyes de inmigración abre nuevas puertas para que los estafadores aprovechen la confusión y la desesperación para robar dinero». Esta situación ha sido particularmente prevalente durante esta administración, que ha implementado constantes cambios en las políticas migratorias.
La política migratoria dura de Donald Trump ha generado mucha tensión. Foto:
Claves para evitar caer en la trampa de estafadores
A pesar de la impotencia actual, los abogados afirman que existen herramientas de sentido común que pueden ayudar a las personas a evitar este tipo de fraude y detectar a los estafadores. Entre las recomendaciones más destacadas están:
El agendamiento de citas debe realizarse exclusivamente a través de canales oficiales.
- No respondas a mensajes de texto o WhatsApp de números desconocidos. En su lugar, busca directamente la información de contacto del abogado en su sitio web.
- Verifica la identidad del abogado. Asegúrate de que esté registrado en la Asociación de Abogados de tu estado (bar association) y que no esté suspendido o deshabilitado.
- Consulta la página de recursos recomendados por el Departamento de Justicia de EE. UU.
- Preferiblemente, elige a un abogado recomendado por alguien de confianza que haya tenido una buena experiencia con él.
- Consulta directamente al consulado de tu país para obtener orientación.
- Desconfía de quienes afirmen tener conexiones con autoridades de inmigración o que sugieran mentir a dichas autoridades.
- Duda de aquellos que te presionan para pagar por formularios migratorios (todos son gratuitos) o que te ofrecen «atención rápida» ante un juez o autoridades migratorias.
- Evita a quienes te presionen para firmar documentos en blanco, si piden pagos en efectivo sin ofrecer recibos o requieren que les entregues tus documentos originales como pasaporte.
La consulta con el consulado es recomendable para obtener información fidedigna.
Foto:Montaje fotográfico de Istock Images
¿Cómo puede un colombiano obtener ayuda de la embajada o consulado?
El Tiempo ha consultado a la embajada colombiana en Washington, y se ha destacado que no han recibido quejas específicas sobre colombianos que hayan sido objeto de estafas relacionadas con migración. Sin embargo, han comenzado a organizar conferencias informativas con la comunidad para ofrecer asesoramiento legal sobre temas migratorios y los derechos de los ciudadanos.
«La oficina consular de Colombia en Estados Unidos ha fortalecido su servicio de asistencia legal para guiar a los ciudadanos en cuestiones migratorias. Se han ampliado las áreas generales de orientación legal, donde personal especializado ofrece asistencia y asesoría según las circunstancias de cada caso», indicaron fuentes de la embajada.
A pesar de que el consulado no representa legalmente a los ciudadanos, puede ofrecer asesoramiento general y orientación preventiva para ayudar a los colombianos a identificar señales de alerta, verificar la legitimidad de las ofertas laborales y facilitar decisiones más informadas.
La postura hostil de Estados Unidos hacia los migrantes ha exacerbado el problema. Foto:Tejer
Por último, El Tiempo ha recibido quejas de personas que reportan haber tenido que pagar a intermediarios para conseguir citas en el consulado, muchas de las cuales están vinculadas a su situación migratoria. Esto representa otro caso de abuso contra colombianos e inmigrantes, dado que las citas en el consulado son completamente gratuitas.
Fuentes consultadas indican que estafadores en Colombia han vulnerado el sistema de citas, el cual es sumamente limitado (50 citas diarias en el caso del consulado en Washington), vendiendo posteriormente esos espacios a otros.
La embajada ha sugerido que el consulado está implementando medidas para «optimizar el sistema de citas y evitar el mal uso de sus servicios por parte de terceros sin ética».
Además, reiteran que «las citas se gestionan exclusivamente a través de canales oficiales organizados por cada consulado, y que cualquier oferta externa que implique pagos debe ser rechazada».
Sergio Gómez Maseri – corresponsal – Washington @Sergom68