El municipio con más casos fue Medellín – Desde dentro
Las autoridades del condado de Medellín y del departamento de Antioquia se preparan desde hace semanas, introduciendo normas, prohibiciones
Las autoridades del condado de Medellín y del departamento de Antioquia se preparan desde hace semanas, introduciendo normas, prohibiciones y llamados de atención para persuadir a miles de habitantes de la región a abstenerse de la tradicional alborada con la que comienza diciembre, no sólo en la principal ciudad de la región, sino en todos los municipios aledaños.
Además de ser una tradición que se originó entre los grupos del crimen organizado de la ciudad hace más de 20 años, este «evento» se ha convertido en una de las tradiciones más comunes en Antioquia antes del inicio de la temporada de fin de año.
Como su nombre indica, la «alborada» se caracteriza por la quema masiva de pólvora y materiales pirotécnicos, en la mayoría de los casos de forma irregular.
Y aunque el cielo de Medellín y Antioquia se adornó con decenas de colores la medianoche del 30 de noviembre, detrás de esta costumbre navideña se esconde un problema con el que luchan las autoridades de la ciudad año tras año: la cantidad de quemaduras provocadas por la manipulación y/u observación de la pólvora.
Al finalizar la temporada navideña 2024, el departamento de Antioquia presentó un reporte acumulado de 149 casos de quemaduras; La mayoría de los heridos en la unidad -a excepción de los casos de Medellín y su área metropolitana- se registraron en el norte y noreste. Además, la mayoría de los casos (42) ocurrieron en los hogares de las víctimas.
Datos más detallados muestran que la red hospitalaria de la división operó durante toda la temporada y reportó 15 personas con daños oculares, 14 con amputaciones y seis con daños auditivos. Entre los heridos hay 71 personas con heridas en las manos, 36 en la cara, 18 en las extremidades superiores, 16 en el torso, 10 en el cuello, 5 en las extremidades inferiores, 2 en los genitales y 2 en los pies.
La administración del departamento también determinó que en 45 casos los heridos se encontraban bajo los efectos del alcohol, y siete de los menores heridos se encontraban en compañía de personas ebrias.
Poniendo la lupa en Medellín y su área metropolitana, al 1 de enero de este año, la alcaldía informó que en diciembre de 2024 la ciudad había registrado un total de 47 casos de heridas por pólvora, tres más que en 2023. El récord de fuera de juego de la temporada incluyó a 34 adultos, nueve menores de 12 a 17 años, dos niños de 6 a 11 años y dos menores de 6 a 17 años. cero y dos años.
Ya en el contexto del año 2025, en el período comprendido entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre, a pesar del fuerte aguacero que azotó la ciudad el domingo por la noche, miles de vecinos se prepararon para recibir la Navidad según la tradición y miles de toneladas de pólvora fueron quemadas en varios municipios de la ciudad.
Como siempre, la quema de pólvora quemó gente, y si bien los datos de Medellín mostraron un ligero descenso respecto a las proyecciones de 2024, los datos del departamento registraron un aumento.
En concreto, según un informe presentado por la Alcaldía de Medellín, en la noche del “amanecer” en la ciudad, siete personas fueron quemadas con pólvora, entre ellas tres menores de 12 a 17 años.
De igual forma, en cuanto al desglose de lesiones, la administración distrital informó que el 28.6 por ciento de las quemaduras fueron de primer grado, el 42.9 por ciento de segundo grado y el 28.6 por ciento restante de tercer grado.
Entrando en detalles, de las siete personas quemadas, seis eran hombres; En cuatro casos, las personas que manipulaban la pólvora sufrieron quemaduras y en tres casos los heridos tuvieron que ser hospitalizados debido a la gravedad de sus heridas.
Como era de esperarse, el número consolidado de casos de quemaduras de madrugada en Medellín mostró una disminución de cuatro casos respecto a los once registrados “de madrugada” en 2024.
Ya en el panorama del Departamento de Antioquia se sumaron cuatro casos más a los siete casos de Medellín en Nechí (2), Envigado y Bello, registrando una diferencia del 37,5% respecto a 2024.
Según datos proporcionados por el gobierno de Antioquia, tres personas sufrieron quemaduras en el rostro, cinco en los brazos, dos en los brazos, una en los pies, una en el torso y otra sufrió daños en los ojos.
Además, en Bello, comuna del norte del área metropolitana del Valle de Aburrá, un joven de 21 años sufrió la amputación del segundo dedo de la mano a la altura de la falange distal y quemaduras de tercer grado en los otros dos dedos.
Para ilustrar el alcance del subregistro de manipulación de pólvora a finales de año, el informe de quemas elaborado por la Alcaldía Bello incluyó un caso más que los reportados por el Gobierno de Antioquia, lo que elevaría el número consolidado de lesiones por manipulación pirotécnica a 12 casos.
De manera similar, para las autoridades está claro que es posible que los casos no se notifiquen en mayor medida, ya que se sabe que muchas personas optan por no asistir a los centros de atención después de quemaduras de pólvora.
Por otro lado, aunque la cantidad de pólvora quemada en la ciudad fue muy similar a la anual, las autoridades organizaron numerosas inspecciones y acciones para evitar que se lanzaran fuegos artificiales en la región en la madrugada del 1 de diciembre.
De hecho, a través de un dispositivo en el que participaron más de 1.200 uniformados de toda la ciudad, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá informó la incautación de alrededor de una tonelada de pólvora durante la noche de la alborada.
NICOLÁS TAMAYO ESCALANTE
Periodista de Nación en Medellín.



