Él dice que es un «líder impredecible» que no es un buen socio en la lucha contra las drogas. – Desde dentro
El Secretario de Estado, Marco Rubio, directamente responsable del presidente Gustavo Petro por la decisión de la Casa Blanca

El Secretario de Estado, Marco Rubio, directamente responsable del presidente Gustavo Petro por la decisión de la Casa Blanca de desesperar a Colombia por violar sus compromisos en la lucha contra las drogas.
Rubio habló con los periodistas cuando fueron a Doha, Catar, Rubio dijo que el problema no está en la relación histórica entre los dos países o en las fuerzas armadas o policiales, sino en el liderazgo actual en Bogotá, que describió como impredecible y poco confiable en la ofensiva contra los carteles.
«Colombia ha sido un socio histórico y muy importante, pero ahora tiene un presidente que, además de actuar de forma independiente, no ha sido un buen aliado cuando conoció a los carteles de las drogas. Bajo su liderazgo, no siguen los estándares», dijo el jefe de los diplomáticos estadounidenses, en una tonelada que lo recordó por memorando.
Rubio agregó que aunque el ejército y la policía colombiana han mostrado disposición y compromiso, «el problema es de liderazgo político»,
En su opinión, los valiosos aliados uniformados permanecen y han trabajado durante décadas con Washington con buenos resultados. Pero insistió en que el gobierno de Petro es responsable de que Colombia haya perdido la certificación.
El Secretario no cerró la puerta en caso de un cambio en la relación. «Colombia se puede mejorar, puede ser más cooperativa y seguir los criterios para recuperar la certificación», dijo, dejando la oportunidad que Washington revisa la acción si percibe una gira en la estrategia anti -cárcel del gobierno colombiano.
Las palabras de Rubio se unen a la línea dura caracterizada por Trump en su memorando, donde acusó a Petro de falta de compromiso y envió mensajes ambiguos contra el tráfico de drogas.
La indicación del Secretario de Estado refuerza la historia de que la desesperación fue en gran medida una consecuencia de la desconfianza personal y política generada por el presidente colombiano de Washington.
Sergio Gómez Maseri
Corresponsal
Washington